Mar de ausencia, ola de muerte,
muelle por costumbre inerte,
temeroso a la vida, a la rutina infernal,
dando golpes contra el peñasco
causando pensamientos que no dan más que asco,
afanada a la libertad súbitamente,
como esa brisa que jamás sientes,
deteniendo tu barca, sin haber zarpado,
no correr riesgos por temor,
¡por ese bendito muelle! que te da... calor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 WIRI-WIRI (Comentarios):
Publicar un comentario